lunes, 21 de septiembre de 2009

Lisboa! Día 2 :)


MAÑANA

Empezamos el día en la plaza que se ve desde nuestro balcón: La Plaza de Rossio, donde se encuentra la estatua de Dom Pedro IV. Justo al lado está situada la Plaza de Figueiras, con la estatua de Joao I. Son las 9 de la mañana y desayunando se nos acerca un hombrecito a vendernos gafas de sol, pero esto era sólo una tapadera. Son las 9 de la mañana y ya nos han ofrecido coca.

Andando, andando y andando (no os hacéis idea de cuanto) llegamos a la Plaza del Marqués de Pombal. Un poco más adelante, se sitúan los Jardines de Eduardo VII, en una cuesta arriba eterna... hay una especie de laberinto en miniatura... al final se ven pasar aviones extrañamente cerca y hay un estanque lleno de nenúfares.


TARDE


Después de comer, cogemos el tranvía número 15 hacia Belém. Sigo sin tener muy claro si está en los términos de Lisboa o a parte... Desde aquí partió Vasco da Gama en 1497 para realizar el viaje en el que descubrió la ruta marítima a India Aquí se puede ver el Monasterio dos Jerónimos, la famosa Torre de Belém y el Monumento a los Descubrimientos (Padrao dos Descobrimientos), a orillas del río Tajo. Desde este punto, hay unas vistas impresionantes del Puente del 25 de abril, llamado así en honor a la Revolución de los Claveles, sucedida este mismo en 1974, que provocó la caída de la dictadura de Salazar. La longitud del puente es de 1.013 metros y recuerda mucho al de San Francisco.

No puedes pasar por Belém y no probar sus famosos pasteles de nata, fabricados desde 1837 siguiendo una antigua receta del Convento dos Jerónimos. Son una especie de tartaletas, rellenas de crema y quemaditas por encima... un placer.



Por la noche, hemos probado la ginginha, Es un licor de guindas que siempre fue la bebida tradicional de los trabajadores lisboetas, que paraban un minuto a tomarse un vasito antes de continuar con el trabajo. No se puede dejar de pasar por una de las más típicas bodeguitas, muy fácil de encontrar en una esquina de la plaza del Rossio. Es un local muy pequeño, unos 5m2, en el que sólo hay un mostrador y donde únicamente sirven estan bebida, en forma de chupitos. A una le ha gustado y a otra no... ¡a ver si adivináis!

jueves, 17 de septiembre de 2009

LISBOA EN 5 DÍAS... DÍA 1


... o mejor, dicho, tarde 1.

Llegamos a Lisboa sobre las 6 de la tarde (hora portuguesa o +1), tras un viaje no poco accidentado. Para empezar, nos echamos un "amigo" en la estación de Badajoz, mientras esperábamos el autobús. El pobre hombre tenía tanta ilusión por ver españoles (mejor dicho españolas...) que no ha dudado en contarnos su vida... como que trabaja en Portugal, porque España con la crisis, malamente y ha vuelto a pagarle una multa de moto a su hija... era un poco personaje, para qué mentir... y poco más y le pega a MS por decirle que la crisis se acabaría en el 2010...


Tras llegar a Lisboa, cogimos el metro... me gustan sus estaciones, todas decoradas con azulejos y baldosas de colores, especialmente la de Olaias. Hemos aparecido en la supuesta Plaza de Don Pedro IV, comúnmente, Plaza de Rossio, donde teníamos reservada la pensión (o eso creía yo...). Después de rodear la plaza buscando el número 18, hemos llegado a una conclusión: o nos han timado o esto no es Rossio. Efectivamente, era la plaza de Figueras, que está al lado.



Al llegar a la pensión, me ha recorrido la columna un escalofrío típico de protagonista de peli de miedo... 3º planta de escaleras sospechosas, en las cuales, estaba apostado un cocinero extraño que nos ha llamado "cosinhas lindas"... No había reserva (y de eso me encargaba yo :S) Menos mal que sí habitaciones libres... es lo más barato y más céntrico que hemos encontrado... dejo libre vuestra imaginación!!!

Después hemos salido a dar un paseo por los alrededores. En 10 minutos, nos han ofrecido chocolate 3 veces... y hemos acabado cenando en "Minho Dourado". Yo sardinas asadas mmmmmm Aquí cierran todo muy temprano... y cenan sobre las 8!!!

La Praça do Comercio no se puede ver, es una pena que esté de obras, porque tiene vistas al mar. Para ir hacia allí, tomamos la Rua Augusta, toda empedrada y resbaladiza (admito que el 2º día dejé de contar las veces que pude acabar en el suelo... y sorprendentemente, esto no sucedió en todo el viaje). Esta calle se une con la Praça a través del Arco de la Victoria (ver foto)




Dato curioso: el 1 de noviembre de 1755, a las 9:30, tres fuertes terremotos sacudieron la ciudad. Murieron 90.000 de los 270.000 habitantes y gran parte de la urbe quedó en ruinas, para nunca recuperar su estructura anterior. El primer ministro de Dom Joao I, el Marqués de Pombal, reaccionó inmediatamente y organizó una reconstrucción rápida, en un estilo barato y funcional: la reluciente cuadrícula que se conserva hoy en día.

sábado, 12 de septiembre de 2009

Popeye cornudo

Ella es joven...en un par de meses nacerá para mi y entonces seremos felices.
Olivia será su nombre...cada vez lo tengo más claro. He pensado en su nombre y en como sería durante mucho tiempo y nunca me decidía, ahora que esta más cerca ya soy capaz de bautizarla.
Por su figura alargada, por su rotunda voz, por su piel rojiza, por su delicado tacto y su estética moderna se llamará Olivia.
Estoy ansioso por tocarla con mis dedos, abrazarla y pasar horas juntos. Mi vida cambiará cuando estemos juntos.
Tengo ganas de castigarla a golpes a la vez que nos acariciamos...yo por su largo cuello y ella a mi con su increible trasero. La pondré a tono para que me hable con su mejor voz, me susurre y a la vez moleste a los vecinos con sus gritos.
Cuando estemos juntos me ataré a ella con un cinturón de cuero para no dejarla caer y que dependa de mi...quiero que me vea como algo imprescindible en su vida. Quiero que sín mi noo se capaz de hablar ni de sentir.
Ella será mia y de nadie más.
No la compartiré con nadie y cuando estemos juntos seremos uno.
Esta descripción pedófilo-fictícia habla de mi nuevo bajo que aun no esta conmigo pero ya se como será y que nombre tendrá. Se trata de un instrumento y no de un sueño erótico-festivo de Michael Jackson. Concretamente será un Fender Jaguar de color rojo al que llamaré Olivia y permitirá robarme horas de estudio a cambio de endulzar mis oidos.
Un saludo, MA.

domingo, 6 de septiembre de 2009

Lisboa en 5 días

Próxmamente...

"Cómo pasar 5 días en Lisboa y no morir en el intento"



Decir que vengo enamorada es poco...